¿Qué profesiones son susceptibles de ser sustituidas por IA?
¿Qué profesiones son susceptibles de ser sustituidas por IA?
En un mundo cada vez más automatizado, una pregunta inquietante surge: ¿Qué trabajos son más vulnerables a ser reemplazados por la inteligencia artificial? La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha revelado un informe que destaca varias profesiones en riesgo de ser automatizadas, lo que plantea un reto tanto para los empleados como para las empresas. Si bien algunas profesiones parecen seguras, otras enfrentan un futuro incierto debido al avance imparable de la tecnología.
Profesiones en alto riesgo de automatización
Según la OIT, existen varias profesiones con un alto riesgo de ser sustituidas por la IA. Entre las más afectadas se encuentran los recepcionistas de hotel, vendedores de call centers y bibliotecarios. Estas ocupaciones tienen en común que muchas de sus tareas son repetitivas y predecibles, lo que facilita su automatización.
De acuerdo con la herramienta interactiva de la OIT, se ha desarrollado una escala que mide el riesgo de automatización de las profesiones, donde una puntuación de 1 significa que una tarea puede automatizarse por completo, y 0 indica que no es posible. Por ejemplo, los mecanógrafos y operadores de procesadores de texto tienen una puntuación de 0.80, lo que los coloca en la parte superior de la lista de trabajos susceptibles de ser automatizados.
Otros trabajos en riesgo incluyen a los cajeros de banco, personal administrativo, empleados de contabilidad y recepcionistas de hoteles. Para estos roles, el peligro es inminente, y las empresas ya están considerando implementar IA para reducir costos y mejorar la eficiencia.
Profesiones con bajo riesgo de automatización
Por otro lado, existen ocupaciones que, por la complejidad de sus tareas o la necesidad de creatividad e intervención humana, tienen un bajo riesgo de ser reemplazadas por IA. Ingenieros civiles, médicos generales y enfermeras son algunos ejemplos de trabajos con una calificación baja, alrededor de 0.10 en la escala de la OIT.
Estos profesionales se benefician del hecho de que sus actividades requieren un alto nivel de juicio humano, habilidades sociales y toma de decisiones complejas, que las máquinas todavía no pueden replicar de manera efectiva. Sin embargo, eso no significa que estos trabajos no puedan beneficiarse de la inteligencia artificial como apoyo en ciertas tareas específicas.
¿Qué significa esto para el futuro laboral?
Angélica Cerón, directora de UVM for Business, advierte que aunque la IA puede sustituir algunas tareas, también abre oportunidades para que los empleados se reinventen. “La inteligencia artificial vino a complementarnos”, afirma Cerón. Si bien muchas tareas repetitivas pueden ser reemplazadas por tecnología, siempre habrá espacio para el talento humano en áreas que requieren creatividad, empatía y adaptabilidad.
Esto significa que, aunque algunos trabajos desaparezcan, surgirán nuevos roles donde la interacción humana será esencial. La clave está en que las personas y las empresas adopten la IA para ser más eficientes, sin dejar de lado la formación continua y la adaptación a nuevas tecnologías.
Empleos que podrían beneficiarse de la IA
No todos los empleos están en riesgo de desaparecer por completo. La OIT también menciona una categoría de trabajos que tienen el potencial de mejorar gracias a la inteligencia artificial generativa (GenAI). Profesiones como los fotógrafos, agentes inmobiliarios y peluqueros pueden beneficiarse de esta tecnología para agilizar ciertas tareas, permitiendo que los empleados se enfoquen en actividades más creativas y humanas.
En este sentido, la IA no debe verse solo como una amenaza, sino como una herramienta poderosa que puede transformar las industrias y mejorar la vida laboral de muchas personas.
Conclusión final
La automatización impulsada por la inteligencia artificial está cambiando el panorama laboral. Aunque muchas profesiones enfrentan el riesgo de ser sustituidas, otras se mantendrán fuertes y se verán mejoradas por la tecnología. La clave para los profesionales es adaptarse, reinventarse y aprovechar las oportunidades que trae consigo esta nueva era.